29.7.13

Lo que estoy diciendo no me sale de la voz.

Se asoman
algunas garras
de odio.

Macabro espejo
este
que refleja el reverso
de aquello que seremos.

Estamos dejando
para otro día
el amor,
los abrazos,
tu ropa con encaje,
mis tatuajes,
los discos
de Stevie Ray Vaughan,
la piel de gallina
cuando amanece,
la nostalgia inútil,
el beso en la esquina.

Duele esta ciudad.
Duele
cada madrugada
que encuentra tu partida
y me rompe los escudos.

Se asoman
algunas garras
de odio.

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