4.1.13

Pedazos.

Una vez me tocó
juntar mis pedazos
rastrearlos, ubicarlos
y adivinar después
qué lugar ocupaban.

Dantesco show
cuando a mitad del trabajo
me alcanzó la mañana
y su luz me apunto a la frente
y yo
con unas dos mil señales sangrantes
entre las manos
corrí a refugiarme entre mis viejas sombras.

El ocaso volvió a mi memoria

Una voz en tono menor
me asalta cada tanto
desde entonces. 





2 comentarios:

  1. Pégalos con cola mala desordenados y poco a poco irán haciéndose con su nuevo espacio.
    Las voces se calmarán.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Hasta de ésas se puede aprender, que uno es siempre capaz de recomponerse...

    Besos

    ResponderEliminar