Sentí la necesidad de escupir estas palabras, pero no al vacio, compartirlas más alla del papel o de un blog y entonces, aunque parezca una contradicción, se las grité en la cara a la noche.
Grande fue mi sorpreza cuando vi que la noche las tomaba, las hacia suyas y se las llevava, al aire, al sur siempre, cada vez más al sur. Y yo soñando que llegaban hasta los oídos necesarios y precisos, como si entraran por una ventana habierta desde siempre y para siempre.
Grité amor y vida, grité muerte maldita y olvido, grité sueños y anhelos, grité abandonos y miserias y broncas, grité pobrezas y maravillas y también solte poemas a puro grito. Fuera de mí, como en un lejano sitio, mi alma sentada sobre la hierba me espera.
Me gusta esa metáfora, sólo quítale la "h" a abierta y acentúa "solté" ;)
ResponderEliminarSAludos
Muy bueno Dario ese escupir palabras, o, mejor ese esculpir palabras.
ResponderEliminarUn saludo
Sublime!!! (que importa la ortografía cuando hay tanto sentimiento???)
ResponderEliminarGracias por los comentarios, a todos.
ResponderEliminarVamos a ver como continua este blog.